Se supone que cada blogger deberá hablar de la comida o de la alimentación, pero a su bola, sin ningún tipo de limitación ni consigna previa. Sin duda, se pueden decir tantas y tantas cosas sobre la comida que no sabría por dónde empezar, sobre todo si uno pretende ser un poco original. Al final, después de darle muchas vueltas, he decidido hablar sobre una de mis comidas favoritas, muy típica de estas comarcas del interior de Alicante, que recibe el nombre de "renyons de masero" (riñones de masero).
Aprendí de mi madre a preparar esta receta de tomates al horno y suelo hacerlos a menudo en verano, como acompañamiento a la carne asada a la brasa, especialmente cuando quiero agasajar a algún invitado. No es que tenga nada de particular, pero algunos amigos me dicen que sólo los prueban cuando vienen a mi casa.
INGREDIENTES: Tomates maduros, ajo, perejil, aceite de oliva y sal.
PREPARACIÓN:
- Se coje una bandeja de horno y se cubre el fondo con aceite de oliva.
- Se cojen los tomates, mejor si están maduros, y se cortan por la mitad.
- Se distribuyen los tomates por la bandeja hasta que no quepan más.
- Se pelan y se cortan los dientes de ajos en finas láminas triangulares y se introduce un triangulito de ajo en cada uno de los alveolos o huecos que deja la pulpa de los tomates.
- Se trocea el perejil y se espolvorea por encima de los tomates.
- Se les rocía con aceite y se les pone sal al gusto.
- Se mete la bandeja en el horno caliente hasta que están cocidos (el tiempo varía según el tamaño de los tomates y la temperatura del horno, pero yo prefiero que se hagan poco a poco a baja temperatura, por lo que a veces están 90 minutos en el horno).