Hoy no me quiero levantar

En uno de los puntos del Orden del Día de la Comisión de Cultura que se celebró ayer pudimos tener acceso a las cuentas del espectáculo que, con tanto bombo, tuvo a bien en contratar el PP abusando de su mayoría absoluta, para el deleite del personal la misma semana de las pasadas elecciones municipales.

Adjunto les facilito un cuadro resumen con la asistencia y recaudación de las siete funciones realizadas:




El espectáculo que tanto esperaba Ibi, que tanto se merecía, atrajo en siete sesiones y tres días de programación un total de 2.753 espectadores. Claro que los precios, a 47 y 57 euros la entrada, no eran precisamente populares. Pero fue contemplado por justo la mitad de las personas que podían haberlo hecho. Curiosamente, para algunos, todo un éxito.

Pero es que ahí no acaba la cosa. Todo ese dinero que ven ustedes en el cuadro en la columna de "recaudación" fue a parar integramente a la compañía teatral, y además a las arcas municipales se le cargaron un total de... ¡agarrense a la silla! ... 92.375,46.- Euros, en diversos conceptos. Porque el Teatro Río no estaba terminado, pero el espectáculo tenía que realizarse en las fechas en las que se realizó (¡caiga quien caiga!). Ya ven ustedes, se llenaría el aforo, había un clamor popular ante el magnífico e indispensable espectáculo musical que nadie quería perderse, ... ¡vaya negocio ruinoso!.

Ahora dice nuestra querida Alcaldesa, Mayte Parra, que en estos tiempos que corren hay que apretarse el cinturón, que estamos en una época en la que la austeridad manda. Eso es ahora, en mayo no.

Lanzo una pregunta. A la vista del resultado obtenido, ¿consideran ustedes bien empleados 93.000 € + IVA en este espectáculo? Un apunte, en subvenciones a entidades culturales del pueblo, el Ayuntamiento se gastó en el 2010 un total de 28.320.- Euros (transferencias culturales a Castell Vermell, a la Escuela de Música, a la Coral, etc, etc.).. Con este musical hemos quemado el 3'5 veces ese importe.

Yo me mojo: digo que es un auténtico despilfarro, y si me apuran dado el endeudamiento municipal (meses antes hubo que refinanciar la deuda del Ayuntamiento) un derroche  que raya la malversación de fondos públicos (presuntamente, por supuesto).