Los embustes del negociante

Hace unos días contaba en este blog la sorpresa que nos produjo en el pasado Pleno del Ayuntamiento de Ibi que Miguel Ángel Agüera, anterior Concejal de Urbanismo, se defendiese de nuestro intento de reprobación alegando que estaba "negociando" (en relación a la torre de alta tensión que se ha instalado provisionalmente para poder terminar la urbanización de El Alamí).

Quiero empezar recordando que en su día se adjudicó a Generala la urbanización de los sectores R 27/28/29 y 30 (“L'Alamí”) valorando como criterio determinante el compromiso de ejecutar la obra en 12 meses. Este compromiso fue la clave para la adjudicación, junto con otros compromisos que tampoco veremos cumplidos, por ejemplo, la construcción de un Pabellón Polideportivo cubierto.

En el Pleno de 5 de noviembre de 2007, Agüera sacaba pecho diciendo lo siguiente:

El plazo previsto para acabar la obra finalizó en el mes de noviembre de 2008. En vista del retraso, en el Pleno de 9 de marzo de 2009, cuando ya llevábamos 4 meses de retraso, pregunté por esta cuestión y la respuesta de Agüera fue la siguiente:


Sin embargo, pocos meses después, en el Pleno del 6 de abril de 2009, al ser nuevamente preguntado por esta cuestión, Agüera se inventó una nueva excusa mentira y afirmó que el plazo de duración de las obras era hasta el 10 de mayo de 2009 y que se ha incurrido en una equivocación (no dice quien):



De la importancia de esta urbanización da fe la propia respuesta de la Alcaldesa a la pregunta de mi compañero Nicolás Martínez. En el Pleno de 11 de mayo de 2009, la Sra. Parra decía que "a su equipo de gobierno le parece fundamental la ejecución del Alamí para crecer como pueblo":


Pero como la obligación de un partido político en la oposición es preguntar y controlar la acción del equipo de gobierno, y teniendo en cuenta que se trata de una urbanización "fundamental" según la propia Alcaldesa, en el Pleno de 15 de febrero de 2010 volvíamos a preguntar. Esta vez, Agüera se buscó una excusa rebuscada para justificar el retraso de dos años largos: el derribo de una vivienda.


En el Pleno del 19 de abril de 2010 ya parecíamos estar próximos al final. Según Agüera, para el verano. Por primera vez aparece el problema del soterramiento de una línea, pero afirmó "...estará solucionado".

Pocos meses después, en el Pleno de 4 de octubre de 2010, al ser preguntado sobre el retraso en la finalización de la urbanización, Agüera empieza a repartir responsabilidades. Por primera vez aparece Iberdrola como "la mala de la película":
 

Al mes siguiente, en el Pleno de 8 de noviembre de 2010, Agüera insiste en atribuir a Iberdrola la culpa del retraso en la finalización de las obras. En ningún momento afirma estar negociando nada con nadie. Es más, asegura que son circunstancias que no dependen del Ayuntamiento.
Finalmente, en el Pleno de 17 de enero de 2011, la Sra. Ortega, que ocupó la Concejalía de Urbanismo por un breve espacio de tiempo, insistió en atribuir la responsabilidad a Iberdrola:

EPÍLOGO: Tras años de paralización, tras años de mentiras, Generala presenta una solicitud para poder ejecutar la línea de alta tensión por vía aérea en lugar de soterrada. Dicha solución es ilegal y todo lo que ha venido después ya lo conocen todos.