Pensar que la única responsabilidad realmente importante que habéis asumido es la de portar al hombro la bandera de vuestra Comparsa, ese el punto de arranque y de llegada. Todo lo demás es accesorio. Se podrá añadir más o menos lujo, más o menos boato, o más o menos complicaciones, pero vuestra misión básica es así de sencilla.
Pedir ayuda en vuestro entorno y repartir tareas. No os hace falta un grupo numeroso de colaboradores, es suficiente con un par de personas comprometidas y, a ser posible, conocedoras de las Fiestas ibenses. Apoyaros en los festeros de vuestra Comparsa, muchos de los cuales se sentirán orgullosos de colaborar con pequeños detalles.
Tener en cuenta el Decálogo que se aprobó en la Comisión de Fiestas, pues contiene una limitación a los boatos. Es lo lógico si queremos evitar que los desfiles de las Entradas sean excesivamente largos. Tenéis que pensar en el público, que pasa horas sentado a la espera de veros pasar. Tenéis que pensar en el resto de Abanderadas que desfilarán detrás, que también necesitan de ese público. Ser solidarias.
Habéis tenido la suerte de dar la Vuelta en un año en el que se juntan 14 Abanderadas, algo poco habitual. Os espera un año de convivencia en el que quedareis unidas por un vínculo de amistad que durará toda la vida. Aprovechar los numerosos momentos de tertulia para estrechar ese vínculo.
Los festeros ibenses llevamos varios años analizando las causas por las que faltan Abanderadas y existe un consenso bastante amplio en identificar la cuestión económica como una de esas causas (no la única, por supuesto). Reflexionar sobre la responsabilidad que tenéis frente al mundo festero y mandar un mensaje de sencillez, porque lo sencillo no está reñido con lo elegante. Demostrar a todo el pueblo de Ibi que ser Abanderada está al alcance de cualquier familia.
Mi más cordial enhorabuena.
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