Recuerdo que cuando era pequeño mi padre nos llevó al Circo Price. Quizás porque era la primera vez, quizás por mi corta edad, aquello se me quedó grabado y, hasta el viernes pasado, nunca había vuelto a ver un espectáculo circense que superase aquella primera experiencia.
Hablo del espectáculo "Corteo", a cargo del Circo del Sol, que se ha estado en Alicante y hoy cierra su ciclo de representaciones en nuestra capital. Nos lo recomendó mi hermana, quien no quiso adelantarnos nada, simplemente insistió en que fuéramos a verlo con mis hijas. Le tengo que agradecer el consejo, pues se superaron todas mis expectativas.
Lejos de esas carpas y carromatos de aspecto viejo y ajado que presentan a veces los circos, estamos ante una organización casi perfecta, empezando desde la venta de entradas por Internet (impresas en casa). La recepción perfecta, la climatización en el punto justo (pese al sol de justicia que caía en Alicante), la atención del personal, los servicios, etcétera.
El espectáculo es grandioso y encantador. Un alarde técnico y tecnologico deslumbrante. Docenas de artistas, acróbatas, payasos y equilibristas, perfectamente coordinados, encadenan sus actuaciones sin solución de continuidad, contando una historia de experiencias oníricas en la que la música, interpretada en directo, juega un papel fundamental. Una estudiada iluminación hace el resto, de forma que el espectador permanece boquiabierto desde el principio al final. A camino entre el circo y el teatro, este bello espectáculo derrocha imaginación.
Quedamos gratamente maravillados. Muy recomendable, para adultos y para niños, os lo aseguro. Os dejo el vídeo con el trailer oficial:
Tweet