Justo reconocimiento institucional

A principios del presente año, en una Comisión de Cultura presidida por Antonio Granero, se votó por unanimidad conceder el Escudo de Oro de la Villa a nuestro vecino Luis Satoca Ricart, cuyos méritos son sobradamente conocidos para muchos ibenses. No obstante, en estos asuntos conviene ser escrupuloso y María José Tribaldos, nuestra Archivera local, había preparado un Informe que recopilaba los motivos por los que el Sr. Satoca era acreedor de dicha distinción (como en su día lo fueron Antonio Anguiz o Ramón Samper).

En aquella Comisión se valoró igualmente la conveniencia de celebrar algún tipo de acto institucional el día 9 de octubre, nuestra festividad autonómica, para hacer este tipo de reconocimientos a los ibenses que hayan podido destacar en tareas de recopilación de documentos e investigación de la historia ibense.

Consecuencia de dichos acuerdos fue que el Pleno del pasado 7 de marzo, por unanimidad, aprobó la "concesión al Sr. D. Luis Satoca Ricart del Escudo de Oro de la Villa en reconocimiento a su trayectoria de ibense comprometido con el devenir histórico y social de nuestro municipio”. Os dejo un enlace al Acta del citado Pleno (buscar el punto Cuarto, en la página 8, donde figura también transcrito el Informe de la Archivera al que me he referido).

Sin embargo, iban pasando los meses y el asunto pareció caer en el olvido. Lamentablemente, la salud de Luis Satoca, de 93 años de edad, se ha deteriorado de forma dramática. Me consta que hasta hace un par de años leía y escribía con ordenador, pero, como bien saben sus allegados, la enfermedad de Alzheimer es muy dura y no perdona.

Por este motivo, mi compañero Santiago García preguntó en la Comisión de Cultura del pasado lunes por este reconocimiento, advirtiendo que la salud de Luis Satoca era precaria. Algunos de los presentes, conocedores del acuerdo plenario que he comentado, mostraron también su interés. Al día siguiente Juan Valls recogió el guante y presentó una propuesta urgente al respecto, que fue tratada en la Comisión de Educación del jueves pasado, parcialmente corregida y aprobada por unanimidad. El acuerdo consiste en celebrar un Pleno Extraordinario en el Archivo Municipal, ese lugar emblemático en el que Luis Satoca pasó tantas horas de estudio e investigación, acto que tendrá lugar el próximo 7 de octubre.

Como ibense me satisface que se lleve a cabo este acto, pues justo es reconocer y valorar, aunque sea simbólicamente, la labor de Luis Satoca y de tantos otros que, de forma callada y constante, con gran amor y generosidad, han dedicado gran parte de su tiempo libre a documentar y estudiar la historia local. Desde aquí mi felicitación y mi abrazo.

Finalmente, no quiero terminar sin hacer una referencia a una institución que ha quedado en el olvido y de la que Luis Satoca fue su primer director. Se trata del Centro de Estudios Ibenses, creado por el Ayuntamiento de Ibi el 5 de marzo de 1982 con la finalidad de trabajar y potenciar diversos campos culturales. Sería deseable que la actual Corporación estudiase la revitalización de este Centro, pues sería el mejor homenaje que se podría hacer a todos los investigadores y estudiosos ibenses.